Como el aire que respiramos es imprescindible para vivir. También es imprescindible saber y conocer que el poder se degrada, se corroe y se pervierte y si este poder se perdura en décadas en las mismas manos más incertidumbre se añade. Véase, como ejemplo de lo que escribo, el reflejo propio de la diferente imagen pública que tiene hoy el pueblo español hacia la persona de Juan Carlos de Borbón, rey Emérito.
Pero lo que todavía es peor, es que, aún se agrava más, si esta perversión está sustentada en repetidas mayorías súper absolutas como ocurre en La Rinconada. Si el próximo día 28 de mayo, en que se eligen nuevos ayuntamientos, se diera la circunstancia de revalidar otra mayoría absoluta resultaría negativa para el futuro de La Rinconada (ya hay sentencias firmes del TSJA que anula determinadas actuaciones del PGOU en terrenos del Pago de En medio) Pocos días atrás escribí (Votar o no votar) que el candidato a la alcaldía por el PSOE lleva en las esferas del poder desde 1995, o lo que es lo mismo, desde el siglo pasado y que no ha conocido otro oficio que el de mandar y mandar y mandar, que es diferente a gobernar.
Sería conveniente que este mensaje se hiciera viral, como se dice ahora, y que se extendiese de boca en boca, pero se da la circunstancia que la ciudadanía está cada vez más alejada de lo que se cuece en el ayuntamiento. La ciudadanía rinconera está alienada a través de esa perniciosa prensa municipal llamada TOMA NOTA, que actúa como verdadero opio para el pueblo. Nos hacen ver que no vivimos en La Rinconada (donde no existen problemas), sino en Jauja, donde los perros se ataban con longanizas. Dicho periódico cumple la misma función que cumplía el NODO en la época franquista (lo más jóvenes, por supuesto que les sabrá a chino, pues en sus libros de historia se les oculta esa formación).
Pero esto no es Jauja. Todos los ayuntamientos tienen aciertos y errores y La Rinconada no es diferente a este escenario. Sin embargo, hay una realidad oculta donde la connivencia de los rectores municipales con ciertos promotores de inmobiliarias locales y no locales se traduce en hacerles trajes a medida para sus objetivos particulares en detrimento del interés general por el que debe mirar todo político que se precie. Esta práctica de connivencia es visible y exportable también en la política de subvenciones al tejido asociativo: «yo te doy a cambio de que en tus carteles y en tus actos estemos nosotros presentes para nuestros discursitos». O en la propia política de personal donde impera el nepotismo, o sea, para que sea entendible por todo el mundo, el trato de favor que se otorga a determinadas personas o amigos por el mero hecho de serlo (o ser captados para su causa, que es el voto) sin tener en cuenta otros méritos. Todo se reduce a aquella frase mítica que se oía en la década de los años noventa: «Hazte ver». Hazte ver en los actos públicos del PSOE. Hazte ver en el nombramiento de interventores y apoderados en las elecciones. Hazte ver y tendrás tu recompensa.
Por eso se hace necesario unirse a la OLA DEL CAMBIO, para que la democracia no siga secuestrada en una nueva mayoría absoluta, porque solo así los rinconeros y rinconeras conseguiremos un Ayuntamiento de tod@s y para tod@ desde una gestión ética, participativa, ciudadana y consensuada. Si el bipartidismo fue derrotado, ¿por qué no pueden ser derrotadas las mayorías absolutas en La Rinconada?