Durante los últimos días se vienen produciendo publicaciones en redes sociales alertando de arquetas abiertas, algunas de hasta 2 metros de profundidad, en el entorno del Polígono Industrial Cáñamo 3.

TuPeriódico se ha acercado hasta el polígono para comprobar cómo faltan la mayoría de las tapas de arquetas de las calles del polígono, siendo balizadas y tapadas con palets de madera y, en algún caso, por cintas de la Policía Local. También hemos advertido algunas sin señalización, por lo que cabe extremar la precaución al pasear por la zona.
Pero, ¿dónde están las tapas de esas arquetas y por qué desaparecen?
La respuesta es simple: son robadas y vendidas en el mercado de chatarra o en el de segunda mano. En portales como MilAnuncios pueden encontrarse anuncios, de hasta 60€ la pieza, donde entre profesionales y particulares se negocia con tapas de este tipo, la mayoría de las veces producto de obras.
En el caso de la chatarra, es más difícil seguirle la pista, pues suelen ser robadas y vendidas en otras localidades para no despertar sospecha, haciéndolas pasar por los mencionados desechos de obra, aunque las tapas de arqueta forman parte del equipamiento urbano, y por tanto, son propiedad pública. En este caso, del Ayuntamiento, gestor del polígono.
Las tapas están realizadas en su mayoría de hierro fundido, en fundición dúctil, un material duradero y apto para este tipo de elementos al soportar hasta 12,5 Tn. Como chatarra su precio oscila entre los 8 y los 16 céntimos por kilo, pesando la mayoría de estas tapas entre 25 y 45 kilogramos, para arquetas de entre 40 y 60 centímetros, las más comunes. Así, cada tapa puede rendir con facilidad entre los 2 y 3 euros por las tapas más pequeñas y entre 4 y 8 euros por las mayores.