Con Tomares denuncia que el alcalde popular niega el turno de ruegos y preguntas a los vecinos con el pretexto de una «urgencia personal»

María Ángeles García, portavoz del grupo municipal Con Tomares, conformado por Podemos e Izquierda Unida, ha denunciado en redes sociales que el alcalde de la localidad, el popular José María Soriano, ha cerrado la sesión del Pleno Ordinario de octubre sin atender al turno de ruegos y preguntas de varios vecinos, además de a los grupos municipales.

García explica que «este mes el pleno ha terminado diferente. Normalmente, al finalizar el pleno se contestan ruegos y preguntas de concejales y de vecinos. Hoy no ha sido así, no se han contestado a preguntas, no se ha dejado preguntar correctamente y no se ha dado palabra a los vecinos, algunos de los cuales estaban desde el comienzo del pleno, a las 12:30h, esperando para intervenir»

En conversación con TuPeriódico, la portavoz nos relata que «el alcalde se ha excusado de forma repentina con que tenía temas muy urgentes que tratar» y ha cerrado el Pleno sin dar la posibilidad de preguntar sobre los temas tratados, como dicta el art. 228.2 del Reglamento de Organización y Funcionamiento de las Entidades Locales, recogido en el Real Decreto 2568/1986, de 28 de noviembre. Este artículo también dota al alcalde de competencias para ordenar y cerrar este turno, que es obligatorio en las sesiones plenarias ordinarias (art. 82.4). «En 8 años que llevo en el ayuntamiento, siempre se ha dado opción a los vecinos presentes» recalca García. Cabe recordar que el ayuntamiento de Tomares no tiene un Reglamento de Funcionamiento propio, por lo que es de aplicación la legislación básica estatal.

«Se ha excusado en una urgencia personal, pero podía haber delegado en otro concejal, como se hace siempre que el alcalde tiene que ausentarse del Pleno» señala la portavoz.

En otro video, grabado desde la bancada del público, se puede ver cómo el alcalde popular se levanta nada más cerrar la sesión y abandona el Salón de Plenos entre la incredulidad y las quejas de alguno de los vecinos presentes que han esperado casi tres horas para formular sus preguntas.